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España debe establecer un tiempo mínimo de respuesta para socorrer a quienes son víctimas de un accidente de tráfico'. Esa fue la propuesta concreta lanzada ayer en Zaragoza por el vicepresidente cuarto de la Mesa del Congreso de los Diputados, Jordi Jané Guasch, que en la pasada legislatura presidió la comisión parlamentaria de Seguridad Vial.

'En algunos países, el tiempo de respuesta para que los servicios de emergencia lleguen hasta un accidentado es de 12 minutos, mientras que en Gran Bretaña es de 8 minutos y en Dinamarca de 5', explicó Jané, que pronunció la conferencia inaugural de las Jornadas técnicas de rescate en accidente de tráfico que se celebran en el Auditorio de la capital aragonesa bajo la denominación Congreso 080ZGZ.

Jordi Jané denunció que en España no se haya regulado todavía el tiempo de espera de las víctimas de un siniestro, aunque resaltó que los equipos de emergencia 'hacen todo lo posible por llegar cuanto antes'.

Para el parlamentario, reducir al máximo el tiempo de respuesta es vital para reducir la mortandad en las carreteras, dado que el 40% de las víctimas fallecen entre dos y tres horas después de haberse producido el accidente. En opinión de Jané, el problema de la seguridad vial solo recibe un enfoque punitivo que gira en torno a medidas como las sanciones económicas y el carnet por puntos, 'mientras que la víctima de un accidente individual está sola y a queda desatendida a los tres días'.

En esta línea, afirmó que los radares 'se colocan donde es más fácil multar, y no donde deberían estar puestos, que son los lugares más peligrosos'. 'La seguridad vial no debería estar tan ligada al Ministerio del Interior y, además, debería tener un rango superior, de secretaría de Estado', añadió el congresista.

Jané abogó ante los asistentes al congreso, procedentes de parques de Bomberos de distintas ciudades, por hacer de la seguridad vial una materia transversal, 'al igual que la violencia doméstica', y se pronunció a favor de un pacto de Estado y de una ley global' para abordar el problema de los accidentes de tráfico.

Las jornadas de tráfico abordaron ayer también temas como los siniestros en los pasos a nivel, la asistencia al accidentado, la asistencia médica de Bomberos y los accidentes en que se ven implicados autobuses.

Eduardo Perucha, gerente de Protección Civil y Seguridad Noreste de Adif, llamó la atención sobre las dificultades que entrañan las operaciones de rescate en los siniestros ferroviarios, que atribuyó a tres factores: el suelo irregular (generalmente de balasto), las dificultades para llegar al lugar del accidente y el riesgo de electrocución e incluso e arrollamiento en las líneas dobles, 'dado que los trenes son cada vez más veloces y más silenciosos'.

Por otro lado, un responsable de Hispano Carrocera habló de los avances introducidos en el diseño del chasis y la carrocería de los autobuses para evitar el vuelco y limitar los daños en caso de accidente.

elperiodicodearagon.com